domingo, 24 de enero de 2010

Mad Men

Sé perfectamente que los cafés me sientan mal y luego me traen más problemas todavía para dormir. Y esta tarde me he tomado dos. Y por éso son las tres y media de la mañana y estoy desvelado.
Pero tengo una buena excusa. ¿O no? Había quedado con el informático a tomar café para salir un poco de casa tras cuatro semanas de baja y me he encontrado con que ella se había apuntado también. Y la única manera que se me ha ocurrido para prolongar el mejor momento de mi época de baja ha sido tomar café sin parar para que ella no se fuera.
Y es que cuando te pones a hablar de "Mad Men" y como retrata el machismo de los 60 aderazado con la situación de las mujeres españolas durante el franquismo y ella te mira como si le interesara lo que dices cuando sabes que no le gustan ni las series de TV ni la historia pues te vienes arriba y por la noche sufres las consecuencias.
P.D.: Mientras tanto las pruebas de todo tipo dicen que no tengo nada de nada en la rodilla, pero a mí me sigue doliendo bastante en cuanto ando un poco o utilizo escaleras. Será que me estoy volviendo loco.
P.D.2: Por primera vez en mucho tiempo estoy escribiendo de nuevo con constancia, una media hora cada día (aunque muchos días lo acabo borrando todo porque no me convence). Gracias a Txepho que me metió de nuevo el gusanillo. Algún día igual os cuelgo algo para que me machaquéis ;-)

miércoles, 20 de enero de 2010

París

Paseando por la blogosfera he encontrado en el blog "Bailando el agua" de Pizpireta esta maravillosa fotografía de París. La verdad es que la foto es preciosa, pero el mensaje que hay escrito en la calle...




"La vie est bélle. Et nous sommes comme élle"
"La vida es bella. Y nosotros somos como ella"

Algún día os contaré la razón por la que París es la ciudad que más amo en el mundo y también la que más odio; y por qué necesito volver cada cierto tiempo. Pero ésa es otra historia. 

lunes, 18 de enero de 2010

Sin razón

No tengo ninguna razón pero me ha dolido. Se han puesto al teléfono todos los que estaban menos ella. La oía hablar de fondo pero no se ha puesto al teléfono. No tengo ninguna razón pero me ha dolido.

martes, 12 de enero de 2010

Friends

La vida de vez en cuando te sorprende. Y muchas veces te sorprende pese a que ocurre lo que tú estabas deseando que pasara. Porque una cosa es lo que tú deseas y otra cosa es lo que crees que va a ocurrir en realidad.
Con el día de hoy van 16 días que estoy de baja. Como ya comenté, tengo fuertes dolores en las rodillas. El lunes que viene me hacen una resonancia aunque la traumatóloga de la Mutua cree que no es menisco y que es "sólo" un esguince del ligamento lateral interno de la rodilla derecha. Con lo que una vez que me diagnostiquen sólo necesitaré un poco de rehabilitación para volver a la vida normal.
La cuestión es que nunca creí que me iba a pasar lo que me ha pasado. Todo empezó cuando mi primera tarde de baja llamó CF, luego llamó caísta. A la mañana siguiente llamó Emma en cuanto se enteró. Y también el informático. Y luego el Xboxer. Y mi niña el día de Nochevieja. Y el lunes después del puente hicieron una llamada colectiva desde el trabajo. Y volvió a llamar CF. Y caísta y Xboxer. Y el informático un par de veces más. Y Emma... Y no voy a hablar de los cuatro mosqueteros que me acompañan desde hace tantos años.
Y sí, estoy feliz. Pese a que lo he pasado mal porque ya voy por la novena semana con este problema en las rodillas y hasta hace cuatro días nadie parecía saber nada de por qué estaba así y éso me tenía bastante agobiado. Pese a éso por alguna extraña razón hay gente que ha demostrado que le importo más allá de que se eche unas risas conmigo mientras trabaja o le acompañe a tomarse unas cervezas. Son personas que por encima de éso parece que realmente me aprecian de alguna manera. Y me reconforta y me ayudan a pasar todos estos días encerrado en casa. Y creo que algo me habrán transmitido para que, por fin, el dolor haya empezado a remitir un poco y cada vez me acerque más a caminar de la misma manera en que lo hacía hace nueve semanas. Bueno, ya sé que el reposo absoluto también habrá hecho algo...
En fin, que ellos no lo leerán, pero quede aquí mi gratitud para todos aquellos que hacen que la vida sea un poquito más fácil y agradable de lo que ya es. ¡Gracias, chicos, en un par de semanas o tres estoy dando caña de nuevo!

martes, 5 de enero de 2010

Noche de Reyes

Queridos Reyes Magos:
Otro año más (y ya van unos cuantos) os escribo esta carta para pediros lo que deseo que me traigáis este año. Recuerdo pocos años en los que hayáis traído lo que os pedía, pero oye, la ilusión es lo último que se pierde, y de éso todavía me queda. Sé que mi querida madre, que todavía disfruta con estas cosas me llenará de regalos, que consideraré totalmente inservibles en su 95 %, pero que intentaré sonreír y poner la mejor cara de la que sea capaz (si he conseguido dormir algo, claro). Creo que todavía no se ha dado cuenta de que con un libro o una frikada soy el tío más feliz del mundo.
Pero bueno, con vosotros va la carta de verdad, porque estoy en una edad que ya no quiero el Exin Basket ni el barco pirata de Playmobil, realmente ya no quiero nada material, aquello ya pasó. Y es que este último año ha sido un poco muy extraño. Mirándolo fríamente alguien podría decir que ha sido un Annus Horribilis. Nada ha salido como yo quería y he ido de tropiezo en tropiezo y con una salud renqueante como hacía mucho que no me pasaba. Pero el alma, el corazón me dice otra cosa. Porque he sentido rejuvenecer. Bien es verdad que las cosas no han terminado de salir, desde el fallido viaje a Noruega hasta el "fracaso" en la conquista de mi niña, pasando por cinco días terribles en Berlín o el agravamiento de mi insomnio. Pero he tenido ganas de hacer cosas y las he hecho. He estado en Berlín, Milán, Barcelona, en los Pirineos y en Londres. He pasado unas noches de fiesta inolvidables con mi niña, con Emma, con el informático o con Txepho. He hecho salidas de fin de semana con mi gente. En fin, he intentado vivir la vida, sacarle todo el jugo, disfrutar el momento y no anquilosarme encerrado en casa como hacía hasta no mucho tiempo atrás.
Pero todo ésto es pasado y ha llegado la hora de mirar al presente y de reojo al futuro. Y lo primero que os pido es que mis rodillas terminen de arreglarse de una vez. Tras seis semanas de dolores, ahora llevo dos semanas de baja y no mejoran. Lo último que me dice el médico es que puede que tenga afectado el menisco, pero hasta que no consiga que me hagan la resonancia de una vez... Y yo mientras no sé si estoy más agobiado por no saber qué es lo que pasa exactamente o por llevar ya casi dos semanas encerrado en casa sin tomar unas cervezas con los amigos, sin reírme con mis compañeros de trabajo (y éso que me llaman de vez en cuando para interesarse todos aquellos y aquellas en los que creo...) o sin ir a mi librería de cabecera a ver que puedo pillar para añadir al montón de pendientes. Y también os quiero pedir que éso nuevo que ha salido y que me van a mirar sólo sea una tontería sin importancia. Y no voy a nombrarlo hasta que pase todo porque estoy empezando a agobiarme y emparanoiarme (¡vaya palabro!) con el tema. Y si a todo ésto le añadís acabar con mi insomnio y que deje de perder peso sin razón aparente ya vais a conseguir dejarme como nuevo.
Y quiero un corazón nuevo. Quiero que me traigáis la capacidad de ilusionarme con alguien de nuevo. Ella me ha dejado muy tocado. Me convencieron (y creí) de que todo estaba tan cerca, tan al alcance de mi mano, que el despertar fue cruel. La bofetada fue brutal y me ha costado levantarme de nuevo (y a veces creo que no me he recuperado del todo). Hay muchos momentos donde tengo la sensación de que se ha escapado el tren de mi vida, pero vivo en una ciudad que es nudo de comunicaciones y trenes pasan muchos cada día (y muchos AVE). Cuando estoy de buenas sé que esa oportunidad, esa ventanita se va a volver a abrir, así que sólo queda vivir para esperarla. Pero si vosotros tres me echáis una mano os lo agradecería ;-) Como el refranero es sabio, intentaré aplicar aquello de "clavo quita a otro clavo", pero sin obsesionarme.
Y para finalizar, para mis lectores, me gustaría que les traigáis lo que quieran. Ellos y ellas son también compañeros en esta aventura (aunque no lo sepan) y leyéndolos aquí o en sus blogs me hacen pasar muy buenos ratos. Son unos cuantos, no voy a nombrarlos porque me dejaré a alguno y no quiero enfadarlos.
En fin, feliz noche de reyes a todos y a ver si mañana o dentro de una semana o un mes tenemos todos aquello que os hemos pedido.
Un abrazo de uno que no se cree del todo éso de que los Reyes sois los padres...